14ª JORNADA. Las bajas marcaron el partido

Valdelacalzada: Trejo, Melli, Saúl, Marco, Cristian (Romero, 61'), Escorial, Bele, David Cruz (Pedro Juan, 68'), Soto, Juanpa y Javi (Albertino, 80').

Moralo: César Carrasco, Dani, Fran Mancha, Arellano, Aarón (Jorge Muelas, 74'), Lolo, Tortu, Adri (Natalio, 81'), Miguelín, Josu (Durán, 68') y Rulo.

Árbitro: Castillo Peláez, de la delegación de Badajoz. Correcta actuación, estuvo bien. Expulsó por doble cartulina amarilla al moralo Lolo (74'). Además mostró tarjeta de ese color a los locales Saúl, Escorial, David Cruz y Javi; y a los visitantes Tortu y Miguelín.

Incidencias: Apenas 125 espectadores en el campo municipal de Valdelacalzada en mañana con nubes y claros. Rectángulo de juego en pésimas condiciones, muy irregular.

Comentario: Con tantas bajas, además en su mayoría de jugadores habituales, el Moralo dio por bueno el punto sumado en su séptimo empate consecutivo, ahí es nada. Hasta diez de sus futbolistas no pudieron entrar en la convocatoria, seis por lesión y cuatro por sanción. Ahí es nada. Con ese panorama el técnico Carlos Sánchez se inventó una alineación con varios jugadores fuera de su posición habitual. Además hizo debutar en Tercera a Lolo, Jorge Muelas y Natalio, sin olvidar que además de ellos tres otros tres jugaron el partido también procedentes del equipo filial. Y aunque durante varias fases del encuentro se notaron los desajustes, el entrenador elogió la lucha y entrega de sus pupilos. Mucho más cuando tuvo que jugar el último cuarto de hora con un hombre menos por la expulsión de Lolo.

En la primera mitad el Moralo controló el balón, estuvo mucho mejor que en el segundo que fue cuando más veces perdió el sitio para aspirar a algo más que romper la monotonía de la igualada. Fue el cuadro de Navalmoral quien gozó de las oportunidades de gol más claras, como las protagonizadas por Adri, Natalio y Durán, éste último marcando pero invalidando la acción el colegiado.

Sobre el maltrecho césped se vio a unos verdes más conformistas pero a la vez más claros de ideas para mover el balón durante los primeros 45 minutos. A los valvienses, muy necesitados del triunfo para salir de las posiciones de peligro, les pudo la responsabilidad y no llegaron a poner en apuros en ningún momento a César Carrasco.

En la segunda parte el Valdelacalzada intentó darle más intensidad al juego pero continuó sin crear verdadero peligro. Su juego directo provocaba una y otra vez barullos en el área visitante pero sin remates claros que comprometieran la portería morala. Por su parte, los de Navalmoral necesitaron menos para generar alguna amenaza a los locales, pero la falta de definición en los últimos metros fue decisivo.

Para este próximo domingo en el Municipal, a partir de las 17 horas, el Moralo intentará romper la tela de araña de empates nada más y nada menos que con el líder Extremadura, que haga lo que haga en este choque seguirá siéndolo por la ventaja que ha adquirido con sus perseguidores. La directiva ha declarado el partido de 'Ayuda al Club', y nunca mejor dicho porque el equipo de Carlos Sánchez necesita el aliento de sus seguidores para asentarse en posiciones más confortables de la clasificación.

13ª JORNADA. Sólo ganó el despropósito arbitral

Moralo: César Carrasco, Dani, Fran Mancha, Asiel, Arellano, Edu Madrigal, Pino, Adri (Piti, 63'), Miguelín (Aarón, 75'), Rulo y Óscar.

Badajoz: Alex, Chechu, Borja, Berjano, Sandro, Uva (Edu Torres, 52'), Nieto, Jaén, Oliva, Chino y Herrera.

Árbitro: Gargantilla Fernández, de la delegación de Plasencia. Horrorosa y pésima actuación. Tarjetero y sin personalidad. Expulsó con tarjeta roja directa a los locales Edu Madrigal (38') y Óscar (85'), y a los visitantes Sandro (38') y Berjano (85'), además de al local Pino (81') por doble cartulina amarilla. También amonestó con tarjeta de ese color a los moralos Arellano, Asiel, Adri, Miguelín y Aarón, y a los pacenses Chechu, Borja, Nieto y Edu Torres.

Incidencias: Algo más de 300 espectadores en las gradas del Municipal de Navalmoral en tarde agradable, aunque con nubes y claros. La segunda mitad se jugó con luz artificial. Césped artificial con excesivo caucho flotante. El Moralo saltó al campo con una camiseta en la que se pudo leer 'Ánimo Súper', en alusión a su compañero lesionado. Al finalizar el encuentro, los mayordomos de las fiestas patronales de San Andrés entregaron un trofeo a cada equipo.

Comentario: Lo más destacado de este envite fue el ridículo protagonismo del trencilla de turno a lo largo de los más de 90 minutos que duró.El joven placentino Gargantilla Fernández completó un desastroso arbitraje con tres expulsiones al Moralo y dos al Badajoz, además de un carrusel de amonestaciones y decisiones absurdas que estropearon el encuentro. Los pacenses llegaron al Municipal después de haber dado la baja a seis de sus futbolistas más caros y con más calidad para rebajar considerablemente su presupuesto y sus ambiciones, y se toparon con unos moralos igualmente con bajas considerables principalmente por lesiones.

El choque aburrió hasta alborotar al público por el desafortunado concierto de silbato del trencilla. El cuadro blanquinegro jugó muy intenso, sobre todo en la segunda mitad, y fue el dominador del balón ante un Moralo  que le costó mucho enlazar jugadas para disputar el control del juego. Las sorprendentes, y ya se verá si decisivas bajas de los pesos pesados de la plantilla de la Unión, en un presupuesto muy alto para este grupo, apenas pareció apreciable ante las bajas de jugadores importantes en el conjunto local, con un capital económico mucho más reducido. Fueron los de Navalmoral quienes acusaron más esas carencias, además de ser los más perjudicados en el absurdo y exagerado rumbo en el que cayó el enfrentamiento.

En los primeros 45 minutos hubo poco juego, muy anodino. La pobre mordiente visitante para crear algo de peligro, ni tan siquiera a balón parado, la desafió el Moralo con muchas más dificultades para circular el balón con convencimiento. Y es que Miguelín y Adri no estuvieron rápidos ni atentos cuando se perfilaron para encarar al guardameta Alex, ni Pino atinó bien con un disparo desde la frontal del área que se perdió fuera por poco.

El poco juego acabó de embarullarse con las primeras expulsiones tras una leve trifulca producida por una entrada de Asiel a un contrario. El capitán pacense Sandro y el mediocentro Edu Madrigal vieron la cartulina roja directa ante la sorpresa de todos porque tampoco fue para tanto la riña entre los jugadores.

Ya en la segunda mitad la UD Badajoz fue más codicioso para intentar alcanzar el triunfo y generó más acercamientos que puso en algunos apuros a la zaga y portero locales. Por su parte, el equipo de Carlos Sánchez continuó pasándolo mal para mover la pelota con criterio para llegar al área de un Alex que apenas tuvo trabajo. A medida que fueron pasando los minutos y los despropósitos del colegiado, dio por bueno el punto que les brindó su solidez defensiva una jornada más. El desarrollo del encuentro pudo haber sido otro sino se hubiera cruzado en su camino un árbitro con más cordura y disposición para dirigirlo.

Así acabó el segundo partido consecutivo del Moralo en casa, afianzándose como el rey del empate del grupo extremeño con ocho. Con esas mismas igualadas en trece jornadas se encuentran los sevillanos Mairena y San Juan, del grupo X, y el navarro Peña Azagresa, del grupo XV. Sólo son superados en estos momentos por el guipuzcoano Beasain, del grupo IV, que lleva diez empates para ser quien más ha sumado en toda la Tercera española. Lo malo de esta estadística es que el conjunto de Navalmoral, en su grupo XIV, es el menos goleador con únicamente ocho tantos. Eso es lo más preocupante porque sin gol no se puede aspirar a algo más que empatar.

La UD Badajoz mantuvo en Navalmoral su tercera plaza

Opinión de los entrenadores: 
Rafa Pozo, técnico del Badajoz: "Sabíamos que el Moralo tiene muy buen equipo y que en su campo lo iba a hacer valer con su lucha y entrega. Veníamos preparados para pelear y trabajar con humildad, y en eso el equipo lo ha hecho de sobresaliente. En cuanto a la actuación arbitral todos lo hemos visto; sólo espero que esto no vuelva suceder porque en este partido no se han visto situaciones como para que los equipos se queden sin tantos jugadores."

Carlos Sánchez, técnico del Moralo: "Ellos han venido demasiado desquiciados, demasiado intensos, y estoy seguro que así no han estado antes en ningún partido de Liga. Al árbitro, además, se le ha ido el partido de las manos y ha sido lo más destacado. Lo peor está por venir porque nos quedamos muy mermados para las próximas jornadas con tantos jugadores sancionados que se unirán a los lesionados. Se hablaba mucho de las bajas de la UD para este partido pero nosotros también las hemos tenido y hemos podido competir."

12ª JORNADA. Tortu firma una nueva igualada

Moralo: César Carrasco, Fran Mancha, Barbero, Asiel, Arellano, Edu Madrigal, Pino, Miguelín (Súper, 58')  (Aarón, 61'), Adri (Tortu, 75'), Rulo y Óscar.

Coria: Jiménez, David, Alegre, Liberal, Mahíllo, Juanqui, Magariños (Pitor, 79'), Pichi, Chema, Álvaro y Cuqui (Pino, 68').

Árbitro: Durán Tato, de la delegación de Cáceres. Para no perder la costumbre en sus visitas a Navalmoral, triste actuación. Aplicó mal cuando quiso el reglamento y se equivocó en varias decisiones notables. Expulsó al cauriense Magariños (81'), ya en el banquillo, y al moralo Tortu (83'), a ambos con tarjeta roja directa. Además enseñó cartulina amarilla al local Adri y a los visitantes Liberal y Álvaro.

Goles: 0-1 Chema (33'). 1-1 Tortu (79').

Incidencias: Unos 400 espectadores en las gradas del Municipal de Navalmoral, con presencia de aficionados visitantes que se hicieron notar, en tarde-noche algo fresca. Césped artificial, aún a estas alturas, en regulares condiciones por el excesivo caucho que no permite el natural bote del balón. Antes del inicio del partido se guardó un minuto de silencio por los recientes fallecimientos del niño Daniel Sánchez, cuando entrenaba al fútbol en Fuenlabrada de los Montes, y de Lorenzo del Castillo, abuelo del amigo y compañero Felipe del Castillo.

Comentario: Moralo y Coria firmaron tablas en un partido pleno de intensidad en el que se enfrentaban dos equipos dispares en la clasificación pero que igualaron fuerzas para concluir en un justo empate al finalizar los noventa minutos. Se repartieron las claras ocasiones y el dominio, por lo que hay que considerar que cada uno de ellos mereció puntuar. El equipo de Navalmoral suma su quinto empate consecutivo para ser el rey del empate con siete tras doce jornadas disputadas. 

El encuentro diferenció las dos partes con claridad. En la primera se vio a un Coria muy bien situado, que demostró por momentos ser el mejor equipo al que se ha enfrentado el Moralo hasta la fecha, con velocidad, presión y acercamientos a la meta de César Carrasco.

A pesar de la teórica superioridad cauriense en el primer acto, las ocasiones claras estuvieron repartidas. A poco de comenzar, la primera la tuvo el conjunto de Rafa Rincón Rus, cuando Álvaro recibió un pase en profundidad para plantarse solo delante de la portería local, y su disparo por bajo se encuentró con la providencial intervención de César Carrasco.

La réplica para el Moralo la puso el delantero Óscar, que al cuarto de hora y después de un buen control, se plantó delante de Jiménez, pero su lanzamiento fuerte fue despejado por el meta visitante con apuros.

Ya en el tramo final del primer periodo, llegó el gol del Coria. Centro chut desde la banda izquierda de Chema al que no llegó César para colarse manso ante la pasividad de la defensa y guardameta locales. Jarro de agua fría para los de Carlos Sánchez, que de ahí hasta el descanso, no inquietaron a Jiménez.

Salió convencido de poder empatar y remontar el partido el conjunto de Navalmoral en la segunda mitad, y fruto de ese convencimiento, obligó al Coria a cambiar su filosofía. Los de Rafa Rincón Rus se replegaron atrás y confiaron su suerte a los rápidos contragolpes en los que intentaron poner en jaque a la defensa local.

A pesar de los intentos verdes, las ocasiones brillaron por su ausencia. Apenas un tiro lejano de Rulo muy alto a contabilizar en los primeros minutos de la reanudación.

Ante la incertidumbre del resultado, el partido se empezó a caldear y contribuyó también con algunas decisiones a ello el trencilla de turno, que tampoco se fue esta vez de Navalmoral si mostrar expulsiones.

Entretanto, el Moralo empezó con su carrusel de cambios buscando algo más en ataque. Desafortunado el primero, que puso a Súper sobre el césped después de varios partidos ausente por lesión, y precisamente por lesión abandonó el partido apenas tres minutos después dejando paso a Aarón. El segundo cambio sí le dio frutos ya que salió Adri, probablemente el mejor del equipo, y entró Tortu, que tomó el relevo para erigirse en el protagonista por partida doble en el encuentro. 

El delantero moralo cogió un balón en el medio del campo, levantó la cabeza y vio adelantado a Jiménez para mandarle una certera vaselina desde cerca de 45 metros, convirtiéndose en el empate y en el delirio en las gradas. Apenas tres minutos después, protagonista negativo, cuando cortó en falta un avance cauriense precisamente en el medio campo y recibió la tarjeta roja directa.

Faltaban menos de diez minutos, y el Moralo afrontó con un jugador menos lo que faltaba hasta concluir. Pasó algún momento de apuro la portería de César Carrasco, pero bien es cierto que a pesar de la inferioridad, no renunció a buscar las cosquillas al Coria hasta los minutos finales.

En definitiva, justo reparto de puntos en un partido en el que los caurienses fueron mejores en una primera parte en la que las ocasiones fueron repartidas, y en el que en la segunda el Moralo se aprovechó de un Coria conformista que intentó guardar la renta sin conseguirlo.

La próxima jornada para los de Navalmoral será el domingo a partir de las 16 horas, de nuevo en el Municipal, ante otro de los aspirantes a la promoción. La UD Badajoz, con presupuesto y objetivos renovados para intentar el salto de categoría con una plantilla de calidad, pondrá a prueba a un Moralo que ha entrado en la dinámica de los empates.

El CD Coria está cuajando su mejor temporada en categoría nacional

Opinión de los entrenadores: 
Rafa Rincón Rus, técnico del Coria: "Nos vamos con un mal sabor de boca por el empate. El árbitro ha concedido un gol al Moralo que para mí ha sido ilegal porque ha venido precedido de una falta de Tortu. El único equipo que ha podido ganar ha sido el Coria y creo que no lo ha hecho porque el árbitro no le ha dejado. Por eso estamos indignados y cabreados. Me quedo con las sensaciones que me ha dado mi equipo, que han sido muy buenas, de buen juego, de buenas llegadas y de muchas ocasiones. Pienso que siempre hemos estado por encima del Moralo".

Carlos Sánchez, técnico del Moralo: "Teniendo en cuenta que el Coria es un rival muy intenso y muy físico, que sabe a qué juega, el punto es muy positivo aunque antes del partido deseábamos romper la dinámica de empates. Lástima de haber jugado el último cuarto de hora con un jugador menos porque podríamos haber hecho más daño ante los riesgos del contrario. Para mí el Coria es el mejor equipo de los que he visto. Lo más positivo para nosotros es que somos muy competitivos y a los rivales les cuesta mucho hacernos gol, ésa es la línea a seguir".

11ª JORNADA. Cuarto empate consecutivo

Ciudad de Plasencia: Luis, Pope, Juanfran, Dani Aparicio, Borrallo, Fran Díaz, Joni (Iván Ruiz, 67'), Nacho, Villa (Ernesto, 78'), David Alejo y Chechu (Sergio Gómez, 60').

Moralo: César Carrasco, Asiel, Barbero, Jonathan, Arellano, Edu Madrigal, Pino, Fran Mancha, Miguelín (Adri, 89'), Rulo (Tortu, 83') y Óscar.

Árbitro: Villa Maestre, de la delegación de Cáceres. Pudo ser buena su actuación si no hubiera omitido un clamoroso penalti a favor del Moralo y algunas otras acciones en las que inexplicablemente se equivocó, por lo que suspendió. Mostró cartulina amarilla al local Ernesto y a los visitantes Asiel y Barbero.

Incidencias: Menos de un centenar de espectadores en el Complejo La Vinosilla de Plasencia en mañana nublada, aunque no llegó a llover en ningún momento. Césped artificial en buenas condiciones. El Moralo jugó con su segunda indumentaria, negra con algunos ribetes blancos, por no estar disponible la habitual después de haber jugado el pasado jueves.

Comentario: En tres días de visita a Plasencia, dos puntos más que suma el equipo de Navalmoral que no acaba de impulsarse en la tabla para despegarse de la zona peligrosa. Continúa en la templada con relativa comodidad pero necesita ese impulso que dan las victorias para acomodarse en puestos más tranquilizadores. Los cuatro empates seguidos le han estancado en la clasificación y se encuentra en el alambre para comprometerse aún más con las posiciones bajas o por el contrario respirar en los puestos medios altos.

El encuentro disputado en La Vinosilla tuvo dos periodos bien diferenciados. El Moralo fue de más a menos y el Ciudad todo lo contrario. En la primera mitad los de Carlos Sánchez controlaron el balón para llevar más la iniciativa en el juego. A pesar de ello las ocasiones para marcar no fueron muchas, aunque sí claras.

Antes de cumplirse el primer cuarto de hora, Miguelín fue objeto de un claro penalti que el colegiado de turno pasó por alto incomprensiblemente. El jugador moralo recortó dentro del área y recibió la patada, sonora y sin discusión, del defensor local Dani Aparicio. El trencilla dejó seguir ante la sorpresa de todos.

El propio Miguelín gozó después de la oportunidad más nítida de todo el partido. Un defensor y el portero placentino chocaron en el área pequeña ante la presencia del extremo visitante, que a puerta vacía mandó el balón alto tras un bote. Lo más difícil era no enviarlo entre los tres palos, aunque Miguelín no esperó tan clara ocasión para abrir el marcador.

En la segunda parte, después del dominio moralo en la primera, llegó la frescura del Ciudad de Plasencia. Al cuadro de Navalmoral le fue faltando energía para enlazar jugadas y llegar al portal contrario. Aún así se defendió bien y soportó lances peligrosos del rival. El más claro para marcar lo protagonizó Iván Ruiz nada más saltar al campo. El delantero local remató cruzado para ver cómo el disparo se estrelló en un palo.

En el tramo final los moralos lo pasaron mal ya que los placentinos apretaron a la desesperada viendo el cansancio de los de Navalmoral. Afortunadamente el desacierto de los atacantes y las intervenciones de César Carrasco evitaron que el encuentro se resolviera con un mínimo triunfo. En este segundo periodo el Moralo apenas tuvo algunas acciones a balón parado para inquietar el portal de Luis, mucho más tranquilo que en el primero.

Ahora, después de dos jornadas consecutivas fuera de casa, la escuadra verde enlazará otras dos en el Municipal para enfrentarse a equipos que están instalados en el cuarteto de cabeza. Primero vendrá el sábado 10 el Coria de Rafa Rincón Rus, que va camino de cuajar su mejor temporada en categoría nacional, y a continuación el domingo 18 llegará la UD Badajoz.

1ª JORNADA. Demasiado se hizo sobre el patatal

Plasencia: David Mena, Jairo, Parri, Barrachina, Dioni, Berto, Toto, Chencho (Caballero, 71'), Sergio, Javi Bravo (Barbero, 81') y Luismi (Luis Delgado, 86').

Moralo: César Carrasco, Dani (Asiel, 60'), Barbero, Jonathan, Arellano, Edu Madrigal, Pino, Adri (Aarón, 64'), Miguelín (Josu, 90'), Fran Mancha y Óscar.

Árbitro: Pavón Guillén, de la delegación de Cáceres. Se equivocó en decisiones determinantes como para aprobar. Mostró tarjeta amarilla a los locales Dioni y Sergio; y a los visitantes Dani, Jonathan y Fran Mancha.

Goles: 0-1 Óscar (65'). 1-1 Luismi, de penalti (73').

Incidencias: Unos 150 espectadores en las gradas de la Ciudad Deportiva de Plasencia en mañana festiva. Nubes y claros, con ligero viento que favoreció un periodo a cada equipo. Terreno de juego en malas condiciones, muy irregular y con algunas calvas de barro. Antes del pitido inicial se guardó un minuto de silencio por el fallecimiento de la abuela del jugador local Albarrán. El partido corresponde a la primera jornada, aplazada el 28 de agosto por desavenencias entre la federación territorial y los clubes.

Comentario: El Moralo es casi el rey del empate tras la disputa de las diez primeras jornadas de Liga. Además, pasados todos esos partidos no ha logrado marcar en ninguno de los primeros tiempos. Y eso que ha tenido oportunidades claras para ello durante los 45 minutos iniciales de la mayoría de los encuentros. Como tampoco le han señalado ningún penalti a favor... y más de uno ha sufrido sin ser castigado.
Todo eso: igualdad, no marcar en el primer tiempo a pesar de tener ocasiones claras y un penalti no pitado le sucedió a los verdes en Plasencia.

En el ecuador de la segunda mitad iba por delante en el marcador el cuadro de Navalmoral y lamentablemente no pudo salvaguardar la ventaja por mucho tiempo por culpa de un discutido penalti cuando peor lo tenía el conjunto rival. Habría sido tres puntos muy importantes, aunque lo positivo del envite fue que sumó su cuarto partido consecutivo sin perder y el equipo moralo coge algo más de confianza.

El partido se inició con unas primeras acciones, a balón parado, que rondaron el portal placentino. Eso sí, la UPP se sacudió ese empuje visitante con un precioso disparo con efecto de Javi Bravo que se estrelló en un poste. Ese lance metió el miedo en el cuerpo a los moralos, aunque eran ellos quienes dominaban el balón. Y es que las ocasiones, a la contra, las protagonizaba el Plasencia con Sergio y Luismi muy activos en ataque. Ambos rondaron el gol. Luismi rompió el fuera de juego en posición muy dudosa, encaró a César Carrasco pero su disparo cruzado se perdió fuera por poco. Después, el propio guardameta moralo realizó un paradón para despejar a córner un tiro a la escuadra de Sergio tras un peligrosa pérdida en la frontal del área.

Los de Carlos Sánchez también gozaron de oportunidades para marcar medianamente claras. A un posible remate desde cerca de Barbero que acabó en córner, le siguieron un lanzamiento alto de Pino en la estrategia tras sacar Jonathan un golpe franco lateral al borde del área. Poco después, Adri ganó la posición a su marcador por la derecha y estrelló el balón en el travesaño tras tocar suave cuando pisó área y ver al portero ligeramente descolocado.

Con igualdad y entretenimiento finalizó una primera mitad, que dado el mal estado del césped, se pudo catalogar de más que aceptable. En la segunda, con el patatal cada vez peor, se preveían menos llegadas con peligro y más juego directo a la espera de la segunda jugada.

Y en cierta manera así fue. El equipo de David Salvo quiso tener el balón más tiempo en sus pies pero en realidad no supo comprometer al portal contrario con lances peligrosos. A Luismi y Sergio cada vez les costaba más controlar ante los defensas rivales y más aún rematar entre los tres palos.

Una galopada de Miguelín por la derecha fue el primer aviso del Moralo en el segundo periodo, pero su tiro cruzado se fue ligeramente desviado. Minutos después, con un toma y daca algo insulso por guardar más la verticalidad que el mando del juego, llegó un gran pase interior de Edu Madrigal a Óscar que se convirtió en el 0-1. El delantero salió rápido ante la pasividad de la defensa y el buen envío del compañero, se plantó delante de David Mena y le batió por bajo con tranquilidad. Primer gran gol para quien tiene el peso de la ofensiva verde una campaña más.

Como era de esperar, al equipo jerteño le entraron las prisas y quiso llegar al área morala por la vía rápida. Acumuló lanzamientos en largo sobre la plantada zaga contraria, que pareció segura para abortar cualquier atisbo de reacción local. Pero en un balón sin aparente peligro, fuera del área pequeña y cerca de la línea de fondo, un segundo bote lo intentó enganchar Fran Mancha ante Sergio y el delantero local cayó. El árbitro no lo dudó y señaló pena máxima.

Luismi, el goleador de la UPP y en estos momentos también del grupo, no perdonó y engañó a César Carrasco para establecer el 1-1 cuando el cronómetro se encaminaba hacia el último cuarto de hora. El golpe fue duro para el Moralo, aunque continuó bien ordenado atrás para tratar de sorprender con espacios. Y casi lo consigue con Aarón muy dinámico por la izquierda, con Pino que quería todos los balones para organizar los ataques y con Edu Madrigal que fue asomándose sobre un campo muy perjudicial para su calidad.

En el tramo final, Dioni tocó claramente el balón con una mano en un lance áereo e impidió que un moralo lo recogiese dentro del área. Las lógicas protestas visitantes cayeron en saco roto incomprensiblemente. Al rato, una falta directa lateral, casi a la línea del área, la puso Jonathan en la escuadra pero encontró la fenomenal respuesta de David Mena para rechazar con muchos apuros. Ahí acabaron las acciones con peligro en ambas porterías.

Plasencia y Moralo firmaron unas tablas que en cierta manera resultaron justas, aunque al conjunto de Navalmoral les supo agridulces porque no supo leer del todo un choque que se le puso de cara en un momento decisivo. Aún así, el próximo y cercano desplazamiento de nuevo a la ciudad del Jerte, este domingo por la mañana para medirse a un buen Ciudad, puede servir para espolearle justo antes de jugar dos jornadas seguidas en casa ante serios candidatos al cuarteto de cabeza según sus objetivos y presupuestos: Coria y UD Badajoz. Pero eso ahora es otra historia.